Dio guerra pero salvaguardó el comienzo del festejo. La lona que resguardaba de la lluvia el ruedo de Olivenza dio más trabajo de lo esperado. Cerca de 30 minutos aproximadamente tardaron los operarios en poder retirarla, para que comenzara la segunda de Feria.
Como se ve en el vídeo, las fuertes rachas de viento parecían hacer imposible la labor. Cada vez que los operarios intentaban tirar de ella, se embolsaba, levantándose varios metros en el aire. A punto estuvieron de salir volando.
Bromas aparte, finalmente pudieron retirarla y la lona fue pieza clave del desarrollo de la segunda de la Feria del Toro.