Javier Zulueta cobró una gran estocada al volcarse al entrar a matar al sexto con mucha verdad. Tanta, que fue volteado feamente y de manera espectacular en una estampa de gran angustia. Afortunadamente todo quedó en los golpes, pues paseó una oreja de peso. La secuencia fotográfica de la voltereta, en el objetivo de José Salvador.