El descabello impidió a un gran Manzanares acompañarles a hombros.
FOTOS DE FIDEL ARROYO DEL FESTEJO
Fotos: FIDEL ARROYO
Entretenido espectáculo en Pozoblanco. La maestria de Ponce, el aroma de Manzanares y la ilusión por lanzar a un nuevo matador, Juan Ortega, motivaron que la afición cordobesa se olvidara hasta de la lluvia que arreció en varios momentos del festejo.
Buen toro el segundo, noble y a más. Enrique Ponce cuajó una faena marca de la casa, impecable en cuanto a técnica y repleta de temple y majestad realizada bajo una tromba de agua. Se gustó el valenciano, que mató de una estocada entera. El palco negó incomprensiblemente el segundo trofeo, pedido con mucha fuerza.
El tercero tuvo la virtud de la movilidad. Buena faena de José María Manzanares, que brilló especialmente en el toreo al natural, por donde surgieron los pasajes más profundos. Belleza en el toreo accesorio y una estocada de defectuosa colocación que le privaba de la segunda oreja. El sobrero quinto fue un buen toro al que el alicantino cuajó a placer sobre ambas manos. Faena repleta de temple y estética, con el inconfundible aroma Manzanares. El descabello le privó de los trofeos.
Pozoblanco (Córdoba), 27 de septiembre de 2014. Toros de Zalduendo, el 5º lidiado como sobrero, de correcta presencia y juego desigual. Mejores 2º y 5º. Enrique Ponce: Oreja con fuerte petición de la segunda y oreja; José María Manzanares: Oreja y ovación con saludos; Juan Ortega, que toma la alternativa: Ovación con saludos y dos orejas. Entrada: Dos tercios de plaza. Al finalizar el paseíllo de guardó un minuto de silencio en memoria de Paquirri al cumplirse el XXX aniversario de su fallecimiento.
