Albert Serra, durante la rueda de prensa tras la presentación de su documental.Albert Serra presentó este martes su documental Tardes de soledad, que refleja fielmente y como nunca antes se había visto la tauromaquia. Con Roca Rey como protagonista, el cineasta catalán ha revolucionado el festival donostiarra con una película impactante y que no ha dejado indiferente a nadie, y que competirá por alzarse con la prestigiosa Concha de Oro.
En la rueda de prensa ofrecida ante los medios de comunicación acreditados en el festival, Albert Serra explicó el proceso de creación de la película: “Se fue haciendo muy interesante, sobre todo desde dentro, intentando mantener la perspectiva pura e inocente ante un tema controvertido. Buscábamos imágenes inéditas”.
“Se nota un cierto aprecio por la tauromaquia pero la honestidad del relato hace que los elementos estén allí con toda su expresividad y viveza”, dijo en referencia a que el documental retrata a Roca Rey y al toro tal y como son: “En la película hay un poco de ironía, hay cosas cómicas en los diálogos, hay una cierta fascinación por el tema, aprecio por el protagonista pero no se renuncia a hacer una película de arte. Lo que la gente piense sobre el tema -los toros- es ajeno a la película”.
Acerca de cómo puede verse fuera de España la película, afirmó: “Ha sido seleccionada en todos los festivales de todos los países, la mirada desde fuera no tiene nada que ver con la que se tiene aquí. Tienen una mirada antropológica, ven el hecho -la tauromaquia- como una cosa que existe y les interesa cómo es retratado”.
“A mí me gustaría que la tauromaquia persistiera, que no se prohíba. Pero bueno, la sociedad está cambiando, ahora está de moda ser vegano. Por cierto, si se trata de proteger a los animales, ¿por qué no nos obligan por ley a todos a ser veganos? Quizá sería lo coherente. ¿Por qué no aprueba el Gobierno una ley al respecto? Ser vegano es muy sano. Lo de la prohibición del toreo es un asunto político, y a mí la política no me interesa. Yo creo que la película demuestra que el toreo no es una broma, ni un entretenimiento. Es algo trascendente. Es poético. ¿Es bueno que exista? ¿Es bueno que no lo haga? Que cada cual opine lo que quiera”, dijo en declaraciones que recoge El Mundo.
