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Se vivió un buen ambiente en el regreso de los toros a palma de Mallorca después de dos años en los que la pandemia impidió que el Coliseo Balear abriera sus puertas. Una enclasada corrida de Zalduendo permitió a Juli ser el primer triunfador de este ciclo, tras sobreponerse con temple y ciencia a sus dos toros y cortar una oreja de cada uno de ellos.
Le pudo acompañar Tomás Rufo por la puerta grande pero se lo impidió la espada. El de pepino cayó de pie en su presentación en esta plaza. Menos suerte tuvo Cayetano, con dos toros de muy pocas opciones.
Abrió plaza un toro muy noble de Zalduendo y colaborador, con el que El Juli estuvo muy a gusto, toreando por momentos muy templado. Destacó el toreo al natural, con largura y profundidad. Muy por encima del animal Julián, que tras una estocada paseó una oreja.
El Juli acabó, a base de mucha técnica e insistencia, cortándole una oreja al cuarto de la tarde, un toro manejable. El madrileño, por encima del zalduendo, supo extraer las virtudes del animal. Faena de ciencia pura, que acabó conectando con el tendido en terrenos de cercanías.
RUFO CAE DE PIE
La espada, rara Avis en Rufo, dejó en una ovación lo que hubiese sido un triunfo sonado la presentación de Tomás Rufo en el Coliseo Balear. Supo entender la buena condición del de Zalduendo, enclasado también y que sacó fondo de bravo. Lo cuajó desde el principio Rufo, con mecidas verónicas. Y luego llegó una sinfonía de autoridad y clasicismo, hasta que llegó la espada… y las orejas se las llevó el toro al desolladero.
Quiso más que pudo el sexto de la tarde, un animal enclasado y de notable son que se vino abajo en la muleta. Y eso que Tomás Rufo le aplicó temple, pulso y tempo. Faena que acabó con el torero pisando las cercanías, antes de dejar, esta vez sí, una buena estocada. Oreja con petición de la segunda.
El segundo fue un toro que derrochó tanta calidad como falta de fuerzas. Pese a las protestas, se mantuvo al toro en el ruedo y Cayetano lo intentó por todos los medios, pero la evidente falta de poder del animal deslució todo. Mató de estocada desprendida.
Cayetano supo plantarle cara al manso quinto, que en todo momento apuntó su condición buscando la salida y las tablas. Cuando metía la cara, lo hacía con calidad, pero le faltaba casta y emoción. Sacó oficio y recursos Cayetano, que fue ovacionado.
Palma de Mallorca. Jueves, 4 de agosto de 2022. Toros de Zalduendo, bien presentados, con clase y de buen juego en general. El Juli, oreja en ambos; Cayetano, silencio y ovación; y Tomás Rufo, que sustituye a Morante de la Puebla, ovación y oreja. Entrada: Media plaza.
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