“Queremos que Burgos sea la referencia en el Norte, que vuelva ser esa plaza con crédito que de credibilidad a los toreros”, afirma el empresario Carlos Zúñiga. La principal novedad de la ciudad de Burgos a escala taurina es la inauguración de las obras de remodelación integral del coso de El Plantío, unos trabajos que se vienen desarrollando desde el mes de noviembre y que suponen toda una reconversión con vistas al futuro de la plaza de toros inaugurada en junio de 1967. Con un presupuesto total de 5.573.712 euros, costeado en su totalidad por el Consistorio burgalés, el coso pasará a ser desde esta misma tarde un moderno coliseo taurino, multiusos y cubierto, con capacidad para albergar cerca de 9.500 espectadores, lo que supone una pérdida de algo más de dos mil localidades con relación al anterior edificio.
La fachada exterior se ha recubierto de paneles de tonalidades grises y verdes, obra de la empresa burgalesa Riventi. Por dentro, se han colocado butacas en todas las localidades, se ha habilitado una Puerta Grande, inexistente hasta ahora, y una cúpula reflectante pero inmóvil. “El aforo se ha reducido y eso unido a que los precios de las localidades son bajos nos hace trabajar con un presupuesto que nos obliga a llenar casi todos los días”, expone Carlos Zúñiga. “Nuestro objetivo final es la rentabilidad pero como primer paso tenemos la mente en recuperar la confianza de los burgaleses en su plaza y que cada tarde vivamos un acontecimiento”, reconoce. Tiene por delante dos años de contrato y posibilidad de prórroga. “Nuestra meta es estar mucho tiempo, sostenidos por nuestro trabajo y la satisfacción del público”, afirma.
El ciclo arranca hoy con Ponce, Juli y Talavante (todo hace indicar que se va a colgar el No Hay Billetes) y concluye el 1 de julio. Las figuras, a escena. Regresan los grandes a Burgos. “Sinceramente hemos hecho un esfuerzo grande y en tiempo corto porque nos adjudicaron la plaza muy tarde”, señala el empresario. “Queremos que Burgos sea la referencia en el Norte, que vuelva ser esa plaza con crédito que de credibilidad a los toreros de cara las grandes citas del norte del mes de agosto. Nuestra apuesta en muy ambiciosa pero muy sólida”, subraya. De las combinaciones, Carlos Zúñiga destaca: “El cartel de la inauguración es muy fuerte con Ponce, El Juli y Talavante y una corrida de Antonio Bañuelos que es una gran ganadería y además es burgalesa. Vuelve La Quinta, que hace más de veinte años que no lidia en Burgos. El lunes es otro cartel redondo con Morante, Perera y Cayetano y luego cerramos feria con el cumpleaños de El Cordobés que tiene su atractivo en Burgos y un duelo de rejoneadores entre Pablo Hermoso y Diego Ventura”