El voto taurino

Los taurinos somos solo una pequeña parte a nivel mundial de los colectivos a borrar de la civilización occidental por los animalistas. Mucho más importantes en cantidad son, por ejemplo, toda la industria de la carne, de la piel, de los huevos, de la leche, de la caza y la pesca, etc. Y van a por todos ellos, que nadie lo dude. Solo basta recordar los principios del PETA, principal grupo animalista a nivel mundial, considerado como terrorista en Estados Unidos. Dicen así: “Los animales no son para comerlos, para vestirnos con su piel, para experimentar con ellos ni para servirnos de entretenimiento” , y para apoyar estos principios se centra en la oposición a: a) La cría intensiva de animales de granja; b) La vivisección o los experimentos con animales; c) La cría de animales para obtener su piel y los animales utilizados en espectáculos; d) El exterminio de animales considerados una plaga, los maltratos y las peleas entre animales.

Hasta el momento, en España los animalistas han tomado a la Fiesta de los Toros como su principal objetivo a abolir, tal vez porque han considerado a los taurinos como el colectivo más vulnerable. Pero todas las personas relacionadas, de alguna forma, con las mencionadas actividades o industrias, están en el punto de mira de los animalistas. Deben ser conscientes de ello y pensar que lo que hoy nos está pasando a los taurinos muy pronto les pasará a ellos, y se aplicará aquello de “vinieron a por los judíos, pero como yo no era judío nada tenía que temer; luego vinieron a por los negros, pero como yo no era negro no tenía nada que temer; después vinieron a por los gitanos, pero como yo no era gitano no tenía nada que temer, hasta que un día vinieron a por mí, pero ya era tarde”.

En España tenemos elecciones generales el próximo 28 de abril y todos sabemos, o debemos saber, cuáles son los partidos abolicionistas sin duda alguna, los defensores de la Tauromaquia tibios, o mejor dicho, hipócritas, porque según el día, la hora y el lugar donde se encuentren, pueden ser defensores o abolicionistas de la Tauromaquia. Así han actuado siempre y ahora no van a cambiar. Y también sabemos cuáles son los partidos que de verdad defienden la Tauromaquia y no van a ceder ante la presión y la amenaza de los antitaurinos.

Algunos pueden pensar: “Este o aquel partido no defiende los Toros, pero tampoco los prohibirá”. Se equivoca, pues no hace falta prohibirlos, basta con ponerles muchos palos en las ruedas, que es lo que hacen bastantes ayuntamientos como el de Madrid, el del Puerto de Santa Maria, Villena, el de San Sebastián en su día, etc.

Los verdaderos defensores de la Tauromaquia mañana, cuando llegue el momento, también defenderán la caza y la pesca, y todas las industrias antes mencionadas, y los que hoy están con los animalistas mañana también estarán en contra de la caza, pesca, etc. Los tibios o hipócritas morirán siendo hipócritas en todos los aspectos.

Por tanto todos los afectados por los movimientos animalistas, el día 28 de abril, debemos pensar muy bien qué papeleta echamos en la urna. Yo lo tengo clarísimo: mi voto jamás irá a un partido que no defienda clara y rotundamente a la Tauromaquia, en Sevilla y en La Coruña, en Barcelona y en Huelva, en Baleares y en Canarias, en Madrid y en Bruselas.

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