La Feria de Latacunga 2024 tocó a su fin con el tradicional festival en honor a la Virgen Esperanza de Triana que alcanzó su vigésima primera edición. Tras la procesión de la imagen de la virgen al son de la Salve Rociera, rompió el paseíllo con tres protagonistas andaluces y tres ecuatorianos. Con menos de media plaza se lidiaron cuatro reses de Ortuño, un ejemplar de Valle de Bravo y uno de Triana, de juego variado pero muy desigual presentación. El quinto mereció el honor de la vuelta al ruedo.
Abrió plaza el rejoneador Álvaro Mejía, que estrenó cabalgaduras en una faena solvente y entonada en la que puso dos rejones de castigo, cuatro pares al quiebro y dos banderillas cortas, pero al matar el rejón de muerte descordó a la res y el jinete se quedó sin premio.
El Fandi saludó bien con la capa a su novillo: una larga, verónicas y chicuelinas. Invitó a banderillear a sus compañeros de cartel Manuel Escribano y Paco Cortez, todos muy aplaudidos tras brillantes pares y galleos muy celebrados. El novillo careció de fuerza y el granadino le hizo una faena de pases templados pero a media altura sobre ambos pitones. Mató de una estocada atravesada y un metisaca antes de una estocada entera y desprendida.
Manuel Escribano fue muy aplaudido en las verónicas de recibo y las chicuelinas al paso para llevar al ejemplar al caballo. Las hechuras del novillo destacaron pero no tuvo duración. Otro tercio de banderillas entre ovaciones entre los tres matadores que dominan la especialidad. Hermoso y pinturero fue el inicio de faena de Escribano con ayudados por alto templados. Gracia y ritmo en los derechazos. Al tomar la izquierda, el toro acusó la tendencia a la querencia. Allí continuó la lidia con suavidad y sin apreturas en los terrenos que el ejemplar pedía. Estocada entrera y trasera, y oreja que paseó el de Gerena en la vuelta al redondel.
Borja Jiménez saludó con empaque con la capa a su novillo con un manojo de buenas verónicas. Inició bien el trasteo, con temple y por alto, en tres tandas por el pitón derecho con mucha suavidad. Los naturales llegaron de uno en uno y el remate de faena con ayudados por alto fue de mucha torería. El remate, pinturero. Cuatro pinchazos y una estocada entera trasera dejaron al torero de Espartinas sin el premio auricular.
Paco Cortez recibió por verónicas al repetidor quinto, al que además llevó al caballo por gaoneras. Una vez más los tres matadores especialistas del segundo tercio brillaron y fueron muy aplaudidos. El ambateño empezó toreando de rodillas en los medios al novillo, que poco a poco fue desgranando su alegría, calidad y repetición. Faena con muy buenos pasajes de tandas con la mano derecha, mano baja al natural, molinetes y nuevas series de derechazos, una de ellas sin la ayuda. Luquesinas de adorno, desplante y pase de pecho en circular. Cuando ya aparecían algunos pañuelos pidiendo el indulto, Cortez entró a matar, pinchó y dejó una estocada muy defectuosa, pese a lo cual el público pidió y logró una oreja que el nacional paseó con entusiasmo.
El último novillo del festival fue para José Andrés Marcillo. Tras un buen puyazo de Hernán Tapia, la faena tomó vuelo con muchos muletazos estimables en derechazos de buen corte y expresión. Los tiempos eran fundamentales y así lo entendió el torero ecuatoriano que supo sacar partido perdiendo un paso. La estocada entera apenas contraria no derrumbó rápido a la res y tras el aviso llegó la oreja merecida.
Latacunga (Ecuador), domingo 17 de noviembre de 2024. XXI festival Virgen Esperanza de Triana. Novillos de Ortuño, Valle de Bravo y Triana. El quinto, premiado con la vuelta al ruedo. El rejoneador Álvaro Mejía, ovación con saludos; El Fandi, vuelta al ruedo; Manuel Escribano, oreja; Borja Jiménez, ovación con saludos; Paco Cortez, oreja; José Andrés Marcillo, oreja. Entrada: Menos de media plaza.
