Juan Carlos Benítez fue atendido en la plaza de toros de Málaga por el doctor Horacio Oliva Muñoz tras estoquear al segundo novillo de la tarde. El joven novillero malagueño presentaba un parte que reflejaba: “Deshidratación leve-moderada y glucemia basal alterada”. El pronóstico “grave” le impidió continuar la lidia.