La plaza de toros de Acho, en Lima, se ha convertido en un improvisado refugio para albergar a personas vulnerables ante la pandemia del Covid-19. El ruedo del bicentenario coso se ha convertido en “la casa de todos” y acogerá de manera temporal a 150 personas en sus instalaciones.
El Ministerio de Cultura indicó que ante la emergencia sanitaria ocasionada por el coronavirus y que todo el país viene enfrentando, “es necesario sumar esfuerzos con el fin de cumplir las medidas de prevención, para evitar contagios masivos y acompañar los procesos con el objetivo de mitigar los impactos en la población más vulnerable. Coincidimos con la necesidad de acondicionar este importante espacio patrimonial para que dichas personas accedan a un recinto protegido en el que puedan contar con el cobijo mínimo durante el periodo de estado de emergencia y aislamiento social obligatorio dispuesto por el Gobierno”, señala el comunicado.
El municipio de Lima manifiestó su solidaridad y consideró que esta es una oportunidad crucial para demostrar que el patrimonio cultural puede también estar al servicio de los más vulnerables sin restarle importancia a su necesaria conservación y preservación.
El alcalde de Lima, Jorge Muñoz, fue el encargado de inaugurar estas instalaciones.