La primera corrida de toros de a pie de la Semana Grande de Bilbao dejó un buen sabor de boca, desde que salió el primer toro de Fuente Ymbro hasta que se arrastró el último. El encierro fue una exhibición de presencia y bravura a partes iguales. Miguel Ángel Perera se llevó el gato al agua. Así lo vio Sasha Gusov.