Los toros de Victoriano del Río hicieron honor a su fama de veloces. Un tiempo de 2:28 minutos tardaron en recorrer el encierro. Hasta la curva de Estafeta corrieron muy hermanados y con limpieza, incluso sin apenas caídas de los corredores. Pero fue en la calle Estafeta cuando ya la manada se dividió en dos partes.
La cabecera fue atropellando a los corredores por su velocidad, pero otros más experimentados protagonizaron emocionantes carreras por lo difícil de correr delante de los animales por la velocidad de los mismos y la cantidad de gente. La cola del encierro, con tres toros separados de los bueyes, permitió una segunda oportunidad a los corredores y ahí sí pudieron correr con mejor ritmo y más temple.
En la parte final, entre la curva de Telefónica y el acceso a la plaza, volvieron a producirse tapones y momentos angustiosos.
En el primer parte de heridos solo se han producido dos solicitudes de traslado a hospital por dos contusiones: una en el hombro y otra en la cara respectivamente. Encierro limpio y sin apenas heridos.
La corrida será estoqueada a partir de las 18:30 por Sebastián Castella, Emilio de Justo y Ginés Marín.