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Manzanares: “Nuestra idea es no torear en Sevilla mientras no cambie la empresa”

“Con nuestra ausencia pedimos respeto. Para nosotros y para todos”

“Lo de Sevilla no es producto de un calentón, llevamos ya muchos años tragando”

“A los toreros lo que nos está faltando es expresarnos mejor de cara a los aficionados. Nos falla la comunicación”

“El G5 no es una continuidad del G10, que surgió con buena intención pero se nos terminó yendo de las manos”

“Mi temporada rondará entre las 35 y las 40 corridas”

“No pienso torear en ningún otro sitio ni el Domingo de Resurrección ni durante la Feria de Abril”

José María Manzanares ha mantenido este lunes un encuentro con los medios de comunicación en la ganadería de Garcigrande. El torero alicantino ha querido transmitir varios mensajes a la opinión pública durante una jornada que ha estado dividida en dos partes: un tentadero por la mañana de cuatro becerras y un novillo en el que el diestro ha invitado a salir a un par de representantes de las escuelas taurinas de Salamanca y Madrid; y una tertulia, posterior a un almuerzo, en la que ha atendido a todo tipo de cuestiones.

La polémica suscitada este año en Sevilla ha acaparado gran cantidad de preguntas: “Con nuestra ausencia de Sevilla lo que estamos pidiendo es respeto. Para nosotros y para todos. En la vida el respeto es fundamental y la empresa de Sevilla a mí no, pero a mis compañeros sí les ha ofendido y por lo tanto mi posición es la de estar al lado de ellos. No hay ningún tipo de interés económico en esta decisión. De hecho, Sevilla todo el mundo sabe que es una plaza con entradas caras, donde por torear los toreros sacrificamos muchas cosas”, ha afirmado el alicantino, agregando: “No estoy molesto por los que van a torear en Sevilla, puesto que cada uno es un mundo y al final cada torero lleva su temporada. Creo que la afición de Sevilla va a entender mi decisión. Además, durante las fechas que haya festejos en la Maestranza -Domingo de Resurrección y Feria de Abril- no voy a torear en ninguna otra plaza a pesar de haber recibido ofertas como respeto a la afición sevillana”.

Manzanares no ha esquivado preguntas al respecto: “Lo de Sevilla no es producto de un calentón, llevamos ya muchos años tragando cosas y este año ha explotado. El planteamiento inicial sigue vigente: nuestra idea es no torear en Sevilla mientras no cambie la empresa, aunque reconozco que tengo esperanzas de que poco a poco se vaya solucionando el problema por el bien de todos. Lo que hagan mis compañeros, haré yo”. Asimismo, matizó: “Quizá a los toreros lo que nos está faltando es expresarnos mejor de cara a los aficionados y al público, porque cada vez que hablamos surgen muchas dudas. ¿Por qué surgen esas dudas? Porque hay algo que nos falla y eso es la comunicación”. Además, dijo sobre sus mentores: “Mis apoderados respetan las decisiones que tomo, ésta y todas. Solemos intercambiar opiniones. Ellos me explican lo bueno y lo malo de cada una de las decisiones pero al final el que decide todo soy yo”.

Sobre la novedosa actitud de unión de los toreros en determinados asuntos, ha dicho: “Lo más importante que debemos hacer como figuras del toreo que somos es trasladar los valores de la Fiesta a la sociedad. Cuando el torero actúa dentro y fuera de la plaza como realmente siente, es un ejemplo para la sociedad. Durante muchos años ha faltado trasladar esos valores al pueblo, cosa que nosotros estamos sabiendo hacer a través de poner en valor una mente más abierta. Creo que estamos siendo menos egoístas y más generosos con quienes se acercan por primera vez al mundo de los toros”; concretando después acerca del fallido G10: “Fue una idea que surgió con muy buena intención pero que se nos terminó yendo de las manos. Hubo muchas circunstancias que hicieron que aquello fallara. Hubiera sido más fácil si en el G10 no hubieran existido tantas diferencias económicas. Nos faltó en determinados momentos actitud, compromiso, en otros comunicación y probablemente también hubo una cierta deslealtad entre nosotros. Me da pena que se disolviese, pero de todo aquello se aprende. Lo que ahora llaman el G5 no es una continuidad del G10, puesto que lo de ahora es una cosa puntual, producto del trato que nos ha dado la empresa de Sevilla”.

En cuanto a su temporada 2014, manifiesta: “Hablar a estas alturas de si voy a torear treinta o cuarenta corridas es precipitado. Para mí este es un año muy raro, porque no estar en Sevilla es algo irremplazable para mí. Cada inicio de temporada cuando comienzan mis entrenamientos siempre pienso que estoy toreando en Sevilla. Es la plaza más importante para mí y lo ha sido para mi carrera. Este año no voy a estar y eso me duele en mi corazón. Mi idea es estar en las mejores plazas y en los mejores carteles, y aunque no me quiero aventurar entiendo que mi temporada rondará entre las 35 y las 40 corridas de toros”.

Sobre el acuerdo de comunicación con la empresa Globomedia, ha explicado: “Entiendo que me va a ayudar a poder trasladar a la sociedad los valores que he aprendido en casa desde niño. El sacrificio, la constancia, el esfuerzo, la lucha por conseguir un sueño… A través de Globomedia entiendo que todo va a ser mucho más fácil. Mi meta es trasladar el mensaje de la Tauromaquia a la gente que no conoce el mundo del toro, a los indiferentes, a esos es a los que quiero llegar. A esos es a los que hay que decirles que el toreo es lo más puro que existe”.

Manzanares ha estado acompañado por su apoderado Jorge Matilla, el ganadero de Garcigrande y toda su cuadrilla, mostrando una actitud muy cercana con todos: profesionales y novilleros. En la jornada ha habido una importante presencia de medios de comunicación, taurinos y no taurinos, congregándose casi un centenar y medio de personas.