El novillero sevillano Mariscal Ruiz ha abandonado la clínica de la Fraternidad de Madrid tras pasar una noche ingresado por la "sección completa tendón flexor largo del pulgar y nervio colateral cubital del mismo" sufrida al cortarse con la espada en la mano derecha en la novillada celebrada este domingo en Las Ventas.
La ecografía realizada esta mañana ha descartado una cornada interna en el varetazo del muslo derecho. La preocupación de los facultativos está en la mano derecha: se cortó con la espada tras un derrote del quinto novillo. Cuando se cuadró para matar, la espada se le fue al suelo, pareció que no tenía fuerzas para sujetar la espada. Sin embargo, lo que ocurrió fue que el dedo no le respondió como esperaba: "Intenté apoyar la espada en el pulgar y se me cayó hacia abajo el dedo. Cogí la espada con el dedo índice y corazón, entré a matar como pude. Gracias a Dios lo maté mejor que al otro de mi lote".
Una estocada lograda con una grave lesión como detalló el parte médico de los doctores García Padrós y García Leirado: "Herida en cara palmar primer dedo en mano derecha, con sección completa tendón flexor largo del pulgar y nervio colateral cubital del mismo. Bajo sedación y anestesia locoregional, es intervenido quirúrgicamente en la enfermería de la plaza de toros, siendo trasladado a la Clínica Fraternidad Muprespa - Habana. Pronóstico grave".
El novillero, anunciado en Aire Sur l’Adour el 1 de mayo y en Sevilla el 18, explica los plazos comentados por los médicos: "Me han dicho que debo tener la mano inmovilizada cuarenta días. No quiero perderme Sevilla por forzar a ir a la novillada de Francia".
El sevillano continuará la recuperación en su domicilio y aunque en principio no deberá volver a pasar por el quirófano, le seguirán haciendo pruebas para descartar complicaciones.
