“La deuda del año pasado la han saldado hoy a las 15:00 h.”
“La cifra que dice Ramírez que pido es falsa”
“Si esto hubiese sucedido hace un mes y de otra forma, lo hubiese encajado”
“Querían quitar a Ponce, les dije que no, es mi amigo”
Finito de Córdoba compareció el viernes en el Hotel Córdoba Center para explicar los motivos de su malestar con respecto a su ausencia en la Feria de la Salud, unos carteles que por cierto todavía no son oficiales después de la propiedad del coso de Los Califas obligase a la empresa a suspender la presentación de los mismos.
Finito aseguró en la rueda de prensa que su ausencia le produce “mucho dolor. Estoy indignado, defraudado y traicionado. Es una espina muy grande la que tengo clavada. Esta es mi casa y mi plaza y después de 25 años haciendo el paseíllo de manera consecutiva en su feria, me veo fuera de ella, precisamente cuando estaba atravesando un momento dulce, por lo que siento una gran tristeza no poder demostrarle eso a mi afición, a la que tanto le debo”.
Finito afirma que la negociación de Córdoba, tras acordarlo con su apoderado Simón Casas, la gestionó él mismo con Julián Alonso, a quien considera que le ha traicionado en la negociación. “Cuando me enteré de que Julián Alonso iba a trabajar para Ramguertauro le llamé para felicitarle. A Julián le tengo muy tratado porque trabajó para la Casa Matilla, que me apoderaron durante doce años, y muchas veces me ha acompañado a los sitios y me ha defendido como torero. Siempre hemos tenido una buena amistad, un respeto mutuo y no ha habido ningún roce. Él siempre ha presumido de ser amigo mío, de los abrazos que me daba… Pero me ha demostrado que no es amigo”.
Al hilo, Finito subrayó: “Le dije a Julián Alonso que hablara conmigo y no con mi apoderado Simón Casas. Vino a mi casa y le dije que no se daban los carteles hasta que no se me saldase la deuda del año pasado, una deuda que curiosamente se me ha ingresado hoy a las tres de la tarde”.
Después de varias conversaciones con Julián Alonso, ambos se citan este pasado martes por la mañana. “Fui y cerramos los honorarios, que por cierto, he visto que en Twitter Ramírez ha dicho que pedía 120.000 euros más IVA y eso es mentira, esa no es la cifra acordada. Cuando se hace allí mismo el borrador del contrato con todo acordado, me dice que todavía se lo tiene que mandar a Ramírez para que lo acepte. Sentí que había perdido la mañana para no acabar cerrando nada”.
Después de aquella cita, Finito se enteró la noche del jueves que se quedaba fuera de la feria. “Fui a ver a Julián Alonso a la plaza de toros y después de dos horas hablando en las que me ratifica todo lo que le voy diciendo, me dice que existe la posibilidad de quitar a Ponce del cartel. Le digo que eso no puede ser porque tiene el contrato firmado y además es mi amigo. Al final me despacha con “Ha sido Ramírez”, y ahí acaba todo”.
En un principio, Finito entraba en la corrida del sábado 31 de mayo junto a Morante y Talavante. “Les comenté la posibilidad de que entrara Manzanares, por lo que había sucedido en Valencia y Castellón, pero me dijeron que ya tenían el contrato con Talavante”. En lugar de Finito, la empresa optó por Enrique Ponce.
“Si esto hubiese sucedido hace un mes, yo lo hubiese encajado y hubiera visto la feria desde el tendido, pero me han faltado al respeto. Me siento dolido por las formas, por esa manera tan despectiva en la que me han tratado”, concluye Finito.