Las fiestas patronales en honor a la Sagrada Familia y el Santísimo Cristo de la Vall d’Uixó reanudaron ayer miércoles las exhibiciones taurinas con la suelta de un ejemplar de la ganadería de Sánchez Urbina.
El toro destacó por su impecable y ofensiva presentación, pero dejó bastante que desear en cuanto a su juego, algo reservón y parado.
Por la noche se emboló un toro de Sotillo Gutiérrez que realizó una salida de pilón espectacular, llegando a coger a un aficionado. Se dejó allí las fuerzas y se paró pronto.