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Ojeda: “Volver es un reto, podía estar en silla de ruedas”

Paco Ojeda regresa a los ruedos como torero a caballo. Su primera comparecencia será en la goyesca de Ronda y después hará el paseíllo en Nimes para darle la alternativa a Lea Vicens. Dos grandes citas que para el sanluqueño suponen “todo un reto. He sufrido mucho y no quería quedarme con mal sabor. Quería ver si era capaz de remontar una mala situación y aunque no estoy al cien por cien, sí que me veo bien, con ilusión y con ganas de torear”, asegura Paco Ojeda.

Al torero le estirparon recientemente un tumor en la médula. Fueron momentos complicados, “los médicos me dijeron que tenía un porcentaje muy alto de quedarme en una silla de ruedas pero al final todo ha salido muy bien y me estoy recuperando. Todavía me queda alguna secuela, en la pierna izquierda no tengo la misma sensibilidad y cuando monto a caballo, noto como algún calambrazo en algún movimiento brusco. Pero no quiero lamentaciones porque eso nunca fue conmigo, al público no le interesa y hay que estar en plenas facultades. Yo sé que tengo que estar muy bien o me mandarán para casa. Así fue siempre mi carrera y así lo concibo”.

Confiesa que antes de esta operación, tenía previsto reaparecer a pie. “Estaba todo preparado y se truncó por culpa del tumor. Me hubiese gustado torear un par de mano a mano con José Tomás, era la ilusión de mi vida. Me encontraba muy bien, como en los primeros años pero con la tranquilidad de la experiencia, con ganas de demostrar nuevas cosas y dar satisfacciones. Pero hay que ser responsable y sé que teniendo la pierna así, no puedo torear”.

Tanto en Ronda como en Nimes, dos plazas emblemáticas en su carrera, toreará junto a Diego Ventura, “que es lo máximo a caballo, un relámpago. Pero a uno le gusta estar bien y eso me motivará más, voy a intentar estar a su altura”, añade. ¿Será una reaparición esporádica o con intención de continuidad?, le cuestionamos. “Puede que haya alguna sorpresa más, pero sé que aunque podía torear más, no voy a torear porque sí, sin más, quiero que sea algo especial”.

Para su reaparición cuenta con siete caballos criados en su casa, “todos debutantes”, matiza. “Un par de ellos los debuté el otro día a puerta cerrada en lo de Pablo Romero, donde toreé un toro, y las sensaciones fueron muy buenas. Estoy muy ilusionado con ellos”, concluye.