Pedro Mariscal, de la cuadrilla del novillero Borja Jiménez, resultó herido ayer en la plaza francesa de Roquefort, sufriendo una cornada de tres trayectorias en el muslo izquierdo por la que permanece ingresado en un hospital de Mont de Marsan. Por fortuna la cornada, aunque llegó al hueso, no alcanzó vasos importantes, aunque produjo importante destrozo muscular. Ha pasado la noche con molestias pero sin fiebre, por lo que ya se está valorando su traslado a Sevilla.
El percance se produjo mientras lidiaba en banderillas a su segundo novillo de la Quinta, al que Borja Jiménez cortó una oreja. El mal estado del piso le hizo tropezar prendiéndolo el novillo por la pierna izquierda.