Al primer toro de Jandilla, abrochadito, lo recibió Diego Urdiales con verónicas de categoría. Mejor fue el quite por chicuelinas, muy ceñidas y toreadas. El riojano abrió la faena por estatuarios para instrumentar después dos tandas en redondo, templada la primera; y templada y muy ligada, la segunda. A izquierdas no tuvo tanta continuidad la faena, que volvió a subir el nivel en una serie final a derechas muy sentida y un epílogo torerísimo. Mató de una estocada desprendida y paseó una oreja.
Alejandro Talavante, a un toro terciado que hizo segundo, lo veroniqueó hasta los medios antes de un quite por gaoneras. El extremeño cuajó una faena muy pulseada en el toreo fundamental sobre ambas manos a un toro flojo y también variada en un final con cambiados por la espalda, con desplante incluido, que entusiasmó a las peñas. El final por manoletinas también llegó a los tendidos, así como la contundente estocada para pasear las dos orejas.
Flojo y dócil, el tercero de Jandilla se derrumbó en mitad de la faena de Juan Ortega. Antes, el sevillano toreó muy bien a la verónica, acompasado, en lances que fueron un lujo. La faena de Ortega la fundamentó al natural en muletazos sueltos de mucho gusto. Mató de una estocada tras pinchazo y fue silenciado.
El cuarto tuvo fijeza y repetición, y Diego Urdiales planteó su faena en los medios. La apertura había sido con toreo genuflexo y unos trincherazos excelentes. La actuación del riojano fue de menos a más y creció en el toreo al natural. No hubo series redondas pero sí de un clasicismo y gusto exquisito. Urdiales buscó el premio de la oreja que le abría la puerta grande y lo consiguió tras una serie postrera sobre la derecha rotunda por templada.
Alejandro Talavante cuajó al noble quinto desde los asentados lances y hasta la estocada final. Inició la faena con media docena de muletazos de rodillas para luego torear a placer. Hubo templanza, limpieza, de nuevo variedad en los remates y adornos, al natural y en redondo. Y la traca final llegó con un ramillete de bernadinas que convulsionaron a las peñas festeras. Sumó otras dos orejas e hizo pleno en Arnedo.
Cerró plaza un toro bajo de raza e incierto. Juan Ortega lo intentó e hizo un esfuerzo en una faena de pocos logros en la que acabó atascándose con los aceros y siendo silenciado.
Arnedo, sábado 22 de marzo de 2025. Toros de Jandilla, correctos de presentación y de noble juego en general. Diego Urdiales, oreja tras aviso y oreja tras dos avisos; Alejandro Talavante, dos orejas y dos orejas; Juan Ortega, silencio en ambos. Entrada: Tres cuartos de plaza.