El burraco salpicado que hizo quinto fue alto y aparatoso. Un novillo que se movió más que sus hermanos, unas veces con obediencia en otras ocasiones con irregularidad. Saludaron Juan José Domínguez y Pablo García tras buenos pares de banderillas. Valentín Hoyos lo vio rápido, dándole distancia. Lo manejó muy bien, con oficio y seguridad de plantas. El novillo no rompió de verdad aunque fue obediente. La estocada cayó baja. Saludos.
El segundo abría mucho la cara, astifino. Se coló en varios lances de salida pero Valentín Hoyos -de Salamanca, que se presentaba- dio sensación de solvencia y oficio. En la muleta fue muy complicado por el pitón derecho. Por el izquierdo tuvo mérito la labor del salmantino. Exponiendo mucho, cruzando al pitón contrario. Aguantó coladas. De uno en uno alcanzó nivel la faena que se diluyó en el final sobre el pitón derecho. Pinchó en dos ocasiones. Saludos.
El tercero fue todo un toro, burraco, hondo y largo. De bonita cara. Hizo un extraño de salida, redondeando mucho. Rubén Núñez, que ganó en su momento El Camino hacia Las Ventas, se presentó en esta nocturna. Núñez mostró buen oficio. Fue ahondando en las virtudes del novillo, a veces irregular, demasiado soso. Por el izquierdo mantuvo la humillación. Logró un final ligado y una gran estocada. Saludos tras petición.
Cerró la noche otro serio novillo que siguió subiendo el tipo de la novillada, tan fuerte, tan a contraestilo. Este tuvo una amplitud ofensiva, alta, astifina. De salida embistió bien en un templado lance sobre el pitón izquierdo a Rubén Núñez. Quitó Esplá por fregolinas. El mexicano buscó la distancia en un meritorio inicio de rodillas en el que el novillo se metió por dentro arrancándole la muleta. Se lo hizo más veces por ese pitón. Pese a su apariencia afligida tuvo fondo de nobleza. Mimbres suficientes para que el mexicano estructurara una técnica faena. La estocada cayó rinconera. Palmas.
La tercera nocturna volvió a albergar un importante ambiente. El primero de Couto de Fornilhos fue manso de salida, le costó un mundo acudir al caballo y cuando lo hizo fue sin entrega alguna. Santiago Esplá, de dinástico linaje, mostró sus ganas de agradar en un precioso quite por faroles. En banderillas le costó porque el novillo tendía a ganar la acción. Hubo dos pares de soberbia pureza. Uno de fuera adentro y otro de poder a poder dándole la ventaja al novillo. Con la muleta estuvo muy torero, con preciosos detalles. El novillo nunca rompió para delante. Extendió en demasía la faena, que tuvo detalles para el recuerdo por su clasicismo y variedad. Con la espada se atascó. Silencio tras dos avisos.
El cuarto tuvo volumen de toro. Amplio de cara y con mucha caja. Afortunadamente sin remate. Frenado desde salida. De acusadas querencias. Mal picado por Briceño, que se lo encontró en las dos ocasiones al relance. Santiago Esplá firmó un magnífico tercio de banderillas, clavando los tres pares en la cara. Sin alharacas ni estridencias. En la muleta encontró nulas opciones. El novillo se echó en la primera tanda. Lograron levantarlo. En la suerte suprema fue un marmolillo. Estocada corta tras dos pinchazos. Silencio.
Madrid. Jueves, 11 de julio de 2024. Tercera novillada del certamen Cénate Las Ventas. Novillos de Couto de Fornilhos. Santiago Esplá, silencio tras dos avisos y silencio; Valentín Hoyos, ovación con saludos en ambos; y Rubén Núñez, ovación con saludos tras petición y palmas. Entrada: Un tercio de plaza. La terna al completo hacía su presentación en Las Ventas. Saludaron Juan José Domínguez y Pablo García tras buenos pares de banderillas en el quinto.