De nuevo el toreo pillado entre dos fuegos. Ahora por mor o mejor desamor del Grupo de los Cinco y Canorea, que algunos han resumido como las figuras frente a Sevilla aunque también podría titularse al revés. Una especie de zafarrancho sin sentido por mucho que a última hora de ayer (domingo) y a falta de nuevas escaramuzas o replanteamientos un parte de Canorea mejorase los pronósticos. Es un fuego de comunicados que en este caso y vistos los antecedentes no es nada inocuo. Se trata de una de esas grescas que ya parecen habituales en el toreo cada cierto tiempo en las que cada cual va a lo suyo. Se ponen la tauromaquia por montera y se dejan arrastrar por el orgullo así acaben pegándose un tiro en el pie. Es justamente lo que han hecho. Las palabras de Machado siguen teniendo vigencia: En España de cada diez cabezas nueve embisten y una piensa. En cualquier caso nadie gana, todos pierden, especialmente la imagen del toreo.