Ureña, a hombros en Palencia

GALERÍA DE FÉLIX PALENCIA DEL FESTEJO

VÍDEO RESUMEN DEL FESTEJO

Fotos: FÉLIX PALENCIA

Enrique Ponce emborronó con la espada la faena al primer toro de la tarde en Palencia. El valenciano sorteó por delante un ejemplar con calidad y nobleza en su embestida pero al que no le sobraron las fuerzas. En el toreo en redondo fundamentó la labor el de Chiva que toreó con templanza y suavidad. El mal uso de los aceros dejó todo en silencio. El cuarto fue devuelto tras perder las manos en varias ocasiones, lidiándose en su lugar un sobrero del hierro titular. El valenciano tiró de su oponente con pulso y temple sobre la mano derecha en una labor en la que volvió a perder la oreja tras dejar una estocada desprendida y tres golpes de descabello.

El que hizo segundo no le dio ninguna opción a Alejandro Talavante. Manso y deslucido el de El Pilar, buscó rápidamente las tablas imposibilitando el lucimiento del torero extremeño, que anduvo mal con la espada. Fue silenciado en ése y abroncado en el quinto, un toro del que apenas logramos ver su condición porque le duró un suspiro al extremeño. Comenzó doblándose y rápidamente se fue a por la espada. Dejó dos espadazos desprendidos, una casi entera y un descabello. Hubo aplausos para molestar al torero.

Con las dos rodillas en tierra recibió Paco Ureña al tercero de la tarde, un toro que desarrolló complicaciones en la muleta y ante el que el murciano se mostró muy firme y puesto. Labor maciza, cimentada sobre la mano izquierda y coronada de un gran volapié. Se le pidieron las dos orejas que el palco dejó en una. Idéntico balance -oreja con petición de la segunda- obtuvo en el sexto, un toro probón y mirón, que no dio facilidades al murciano. Sin embargo, el torero se puso en el sitio y anduvo francamente bien toreando sobre las dos manos. Mató de una estocada entera y acabó yéndose a hombros.

Palencia, miércoles 31 de agosto de 2016. Toros de El Pilar (el 4º como sobrero), bien presentados pero de decepcionante juego. Enrique Ponce, silencio y ovación con saludos; Alejandro Talavante, silencio y bronca; Paco Ureña, oreja con petición de la segunda en ambos. Entrada: Algo más de media plaza.

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